sábado, 31 de octubre de 2015

Seducida...



Cuando seduzco
a la muerte
no lo hago
con una filosa daga
de acero bendecida
por dioses del Olimpo, ni con promesas que jamás cumpliré ni con ardientes alcoholes o etílicos placeres de un minuto. Cuando quiero conquistar a esa ufana mujer, le ofrezco la locura de mi pasión por ella. Las letras que mi pluma entrega a un papel inocente de mis intenciones, ajeno de la despedida que se oculta en esas incoherentes poesías u oraciones. 

miércoles, 28 de octubre de 2015

Culminar...



Una daga es la mano fría que cela mi vitalidad,



 es la línea que me separa del ayer y del mañana,



una daga esconde en su caricia las palabras que mi garganta sabe,



pero no atina pronunciar...



Una daga será más tarde mi enemiga,



cuando intente apoderarse de mi existir,



mas mi ser,



egoísta de su conquista,



se niega a seguir su orden, su corte final, ´



donde el río llegaría convertido en mar.



Una daga de frío acero será la causante,



de que mi pecho libre de todo sufrimiento,



elija seguir,



elija probar el sabor de su brillo,



mas prefiera quedarse dentro de su real mundo,



que no resulta tan sencillo,



pero el poder de los amores tiene más fuerza,



y la daga claudica en su intento,



ella recorre otro camino,



y la mujer finalmente hizo lo que creyó—al menos por unos segundos—



correcto.

lunes, 19 de octubre de 2015

Contar...



Te voy a contar dos cuentos...
mi niña,
te voy a contar sobre nubes y flores,
tal vez te cuente sobre tu cuna y sobre tus sueños,
versos que  hablen de  amores.
Te voy a contar más de dos cuentos

antes de dormir cada siesta,
mi niña,
cuentos que hablen de soles y de colores,
colores  que pinten risas en estatuas
de enojados señores.
Te voy a cantar los cuentos como
si fueran canciones,
mi niña,
para que guardes entre tus alas,
la frescura que lo bello de los libros
encierran sin llaves,
secretos
vueltos palabras.

domingo, 18 de octubre de 2015

Escriba...



Delirar


En la suprema nocturnidad
aparecen esos ojos que roban vorazmente el sueño,
llegan y se adueñan de esta piel infiel,
hambrienta de abrazos,
esos ojos,
que robó el fuego de los Olímpicos,
es el que deposita en cada ósculo,
el delirio que como una ofrenda,
se deshace en ambrosia...
esos ojos,
hechiceros,
ojos brujos,
malditos ojos que enamoran mi corazón,
mi carne y mi alma,
de tanto amarlos he gastado los mios,
por no lograr,
dejar de mirarlos,
por no lograr,
abandonarme dentro de su delirio.



sábado, 3 de octubre de 2015

Escrituras...



Significados


 


No conozco todas las palabras


ni todas las letras que viven


en los sentimientos de un ser.


No conozco todas las lunas,


y tampoco a todos los vientres


que el averno desfloró.


No conozco el significado


de la palabra: adiós,


muy parecida, al nombrarla,



a la palabra: amor.